Liga Profesional

El hombre de los botines rojos

David Fernández
David Fernández y sus míticos botines rojos

En la temporada 07/08, Godoy Cruz e Independiente Rivadavia volvían a encontrarse tras 5 años, luego de que el Tomba haya descendido a la Lepra.

Sin dudas la rivalidad entre ambos clubes estaba en crecimiento y ninguno quería perder el partido especial. En el primer encuentro entre mendocinos de la temporada le correspondería al Expreso ser local y se enfrentaban en el Malvinas Argentinas.

Corrían las primeras horas del 18 de noviembre del 2007 y el plantel bodeguero se desayunaba que había sufrido el robo de la utilería en el Feliciano Gambarte. Con riesgo de no poder jugar por falta de la misma, la dirigencia tombina tomó la decisión de llevar al plantel de Shopping esa mañana. A cada jugador le correspondía un par de vendas, un par de canilleras y un par de botines.

En aquel entonces, donde los colores llamativos aún no se aduñaban del fútbol, los jugadores optaban por los botines negros clásicos, a excepción de David Fernández, juvenil surgido del club. “El Fideo” rompería el molde y se hacía de unos F50 ROJOS. “Sos figura o te insulta toda la cancha” le deslizó un dirigente por la arriesgada compra.

Aquella tarde el Fideo eligiría ser figura, con la número 9 en la espalda y la cinta de capitán abría el marcador a las 20′ del primer tiempo y liquidaba el encuentro a los 30 del segundo poniendo el 3-1 parcial. Los botines rojos habían hecho estragos.

Pero la historia no quedaría ahí, en mayo del 2008 sería la vuelta en el parque. Para ese momento, David Fernández venía sumando pocos minutos y le tocaría arrancar desde el banco.

Fernandez no había convertido aún en esa temporada, y por sugerencia de un compañero volvió a calzarse los botines rojos. Oldra le dio minutos y el Fideo y sus botines rojos volvían a hacer de las suyas. 1 a 0 y el autor no se olvidaba de sus aliados, festejo besando el calzado frente a la hinchada rival. El encuentro se lo llevaba una vez más el Tomba, para la alegría de la mayor parte de la provincia.

Desde entonces, la sonrisa que trae alegría para unos. Y el terror que traen para otros.. LOS BOTINES ROJOS.

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