En un fin de semana especial para el hincha tombino, Godoy Cruz enfrentó a Independiente en un Malvinas Argentinas que disfrutó de ambas parcialidades.

El inmenso Daniel Oldrá se hizo presente ( a pesar de su reciente pérdida) y se vio obligado a realizar a una modificación (Fernández sancionado).

Los 11 del Gato fueron: D. Rodríguez; Arce, Barrios, Rasmussen, Meli; Abrego, Leyes, López Muñoz; Allende, Conechny y S. Rodríguez.

Primer tiempo

Gran arranque del elenco bodeguero. Pura presión y juego asociado (a 1 o 2 toques) para doblegar al oponente.

Madrugadora aparición en el área visitante y Cauteruccio (en contra) sentenció el 1 a 0 a favor del más grande del oeste argentino.

Allende (que estuvo muy activo) gozó de algunas situaciones que Rey contuvo de forma excelente. El atacante cordobés estaba muy activo y la defensa roja lo sufría.

Otra sociedad interesante fue la de López y Conechny. El volante ex San Lorenzo, a diferencia de Fernández, cortaba hacia el centro y se mostraba como un doble enganche en situaciones determinadas.

Por su lado, Abrego era el nexo entre la defensa y el ataque. El único en quedar “colgado” fue Salomón (quien tuvo un partido muy reñido con Laso y Báez).

Godoy Cruz fue al ataque incansablemente y, como premio, consiguió ampliar la ventaja a 2 tantos contra 0. Esta vez, Conechny de cabeza elevó el grito al cielo.

Ante la pasiva mirada del conjunto visitante, el Tomba iba al frente y aprovechaba los espacios de Independiente. El 4-4-2 se Zielinski se veía continuamente afectado por las entrelíneas que planteaba el Expreso.

De esta forma, con un panorama completamente favorable, finalizaba la primera parte.

Segundo tiempo

El complemento fue un golpe al mentón a la etapa anterior. Zielinski modificó el esquema y se adueñó del partido. El 4-4-2 mutó a 4-3-3 y allí fue donde pudo comenzar a dominar al dueño de casa.

Rápida reacción ante las modificaciones. Luego de un descuido, Costa entró por detrás de todos y descontó ante el capitán tombino que poco pudo hacer.

Debido a que Godoy Cruz perdió peso en mitad del terreno de juego, Andrada y Núñez saltaron al campo en lugar de Leyes y Salomón.

Oldrá apuntó a un 4-3-1-2 con un triple 5 para retomar el dominio perdido en el sector central del mundialista mendocino. Esta variante fue efectiva y obligó a que la visita patee nuevamente el tablero.

Más tarde entró Ramírez (de floja tarde) por López. El tridente técnico entendió que la visita se volcó hacia la ofensiva y se quiso aprovechar para sentenciar el trámite.

Al rato, Salvareschi y Galdames reemplazaron a Barrios y Meli respectivamente. Piernas frescas para sostener la victoria parcial en la tarde de domingo.

El resultado no cambió. En manos de un impecable Ruso Rodríguez quedó el último atisbo de esperanza del equipo de Avellaneda. Triunfazo del Tomba.

Conclusiones

Cuando se pierde como se perdió la semana pasada, puede haber efectos negativos inmediatos en cualquier club. No en Godoy Cruz.

El Expreso canalizó el golpe sufrido en Rosario y lo transformó en motivación para salir a ganarle a Independiente. A veces con buen juego, a veces con más garra que fútbol, pero con victoria al fin.

Para destacar la labor de Tomás Conechny. Fue la pieza clave que Zielisnki nunca pudo dominar y en sus intervenciones se vio lo mejor del local.

No nos olvidemos de Diego Rodríguez. Cuando las “papas queman” y hay que ponerle el rostro a la situación, el capitán se hace cargo y se hace grande entre los 3 palos.

Buen partido de una zaga central que parece entenderse cada vez más. Floja tarea de los laterales (sector derecho en el primer tiempo y franja izquierda en el complemento).

Correcto trabajo de Abrego y Leyes. Picante Allende por las bandas. Por su parte, Salomón fue puro sacrificio. Por otro lado, muy importante ingreso de Núñez y Andrada.

Hermoso regalo le dio el plantel y cuerpo técnico al hincha. Victoria para volver a zona de copas y seguir prendido en el sector caliente. Ahora, a viajar al norte del país para jugar ante un trastabillante Atlético Tucumán.