El 9 de abril del 2002, Godoy Cruz venció a Independiente Rivadavia y lo dejó sin chances para mantener la categoría. De esa forma, la Lepra descendió al Argentino A y los hinchas del Tomba lo recuerdan.
Se cumple el aniversario de una noche que será folclore por mucho tiempo más,un día como hoy, pero hace 21 años, se enfrentaban en el Malvinas Argentinas Godoy Cruz , ya salvado de todo, e Independiente Rivadavia quien sólo una victoria le permitía mantener la categoría. el Expreso dio la sorpresa en el Malvinas Argentinas y decretó el descenso de la Lepra. Alejandro Abaurre, el héroe Bodeguero quien fue el autor del único gol del partido luego de un rebote,remató de cabeza para que terminó sentenciando el descenso del equipo del parque con ese único gol.
La Lepra tuvo chances de igualar el encuentro desde el punto penal pero Adrián Czornomaz falló su remate y a partir de ahí la historia parecía sentenciada para el equipo dirigido por Alberto Castro en ese momento quien no encontró la manera de dar vuelta el partido y descendía de la mano del Expreso quien venía de un torneo “milagroso” bajo la conducción técnica de Luis Manuel Blanco, quien hizo salvar al equipo de un casi seguro descenso metiéndolo en un reducido por un ascenso a Primera, el cual después perdería con Arsenal de Sarandí.
El encuentro finalizó antes de tiempo,exactamente a los 42 minutos del segundo tiempo por falta de garantías de seguridad.
El ingenio de los hinchas del Expreso se supera a sí mismo cada año. Afiches y vídeos toman protagonismo en las redes sociales para asegurarse mantener vivo el recuerdo que a algunos les duele, pero que muchos disfrutan. Todo esto contextualizado en ese folclore sano que caracteriza al deporte más popular del mundo, lejos de toda violencia que se pueda ejercer sólo por defender colores diferentes.Este año no ha sido menos ,y presuntos hinchas del Expreso colgaron un trapo en el nudo vial, el cual se destaca por la frase: “Yo te descendí”. reza la inscripción en el paño, en el cual también se observan las cifras 9, 4 y 2002. En la cancha también fue una fiesta,con cánticos como,”como me voy a olvidar”, “un minuto de silencio “ también fue condimentado con humo negro y cajones con esqueletos y escudos de Independiente Rivadavia.