En la etapa inicial, el equipo pudo mantenerse ordenado, sobre todo en defensa, ya que le costó producir en tres cuartos de cancha. Con un esquema 3-4-3, logró sostener el orden y conectar algunas triangulaciones, pero con el correr de los minutos perdió terreno y posesión.
Patronato, por su parte, fue superior en remates; incluso, colocó dos pelotas en el palo. No obstante, al Expreso le bastó empujar poco y habilitar a Martín Ojeda para conseguir la ventaja.
Respecto al ejercicio defensivo, el complemento fue una continuidad de lo que había ocurrido en el primer tiempo. Ortíz, Sánchez y González tuvieron química, y se acoplaron de manera correcta.
En esa línea, a quien le tocó realizar el carril izquierdo, Ian Escobar, se le dieron todos los factores para llevarse el premio al jugador del encuentro. El lateral asistió por duplicado, convirtió y no sufrió mayores inconvenientes en el fondo.
Otro punto positivo fue el regreso al gol de Tomás Badaloni. El nueve, criticado en la semana, efectivizó la única situación que le quedó.