El defensor Herrera se retiró del campo de juego a los 71′ luego de un infantil e innecesario planchazo al ídolo de Boca, Carlos Tévez, jugada que fue sancionada de inmediato por el árbitro Lamolina.
Al respecto, el defensor central mostró su arrepentimiento y acotó: “Me voy con bronca. El partido se desvirtúa con la actuación mía”, comenzó autocriminándose razonablemente y continuó: “Mi sensación es que el árbitro con una amarilla lo podría haber solucionado, yo voy a tapar la pelota. Si bien creo que tengo contacto con Carlos (por Tévez) creo con una amarilla lo podría haber solucionado”, reiteró el jugador convencido de que el juez del encuentro podría haber impartido una sanción más leve.
La expulsión del jugador fue determinante para la continuidad del partido, donde Godoy Cruz había comenzado a encontrar los espacios para generar peligro y presionar al rival. Herrera finalmente manifestó: “Yo creo que si hubiese terminado el partido con 11, tranquilamente podría haber sido otro partido”, culminó el jugador que se retiró del complejo xeneize angustiado por su actuación.