Godoy Cruz perdió 0-5 de local contra Talleres de Córdoba. Más allá del pésimo resultado hubo un hecho que marcó el partido: un penal claro que fue cobrado y luego se revirtió la sanción.
Había transcurrido buena parte del primer tiempo y el partido era malo, se prestaban el balón. Sin embargo, Jacquet decidió sorprender con un pelotazo para Freites que fue tocado en el área. Darío Herrera pitó la pena máxima sin dudarlo y el Expreso se ponía a tiro de la ventaja.
Cuando Kevin Gutierrez se disponía a sentenciar al arquero de la T, el árbitro a instancias del línea retrocedió en su decisión y sancionó tiro libre en el borde derecho del área visitante. Claramente había sido penal, y cuentan jugadores que Darío Herrera pidió disculpas por su error una vez finalizado el encuentro.
De nada sirve que paren al árbitro o cualquier medida que se tome, el partido continuó y el resultado fue adverso, nadie sabe lo que podría haber sucedido. No es normal que siempre se equivoquen en contra del Bodeguero.
Los dirigentes van a tener que ponerse firmes con la AFA más allá de su comentario de “no hablar de los árbitros”. Estos “errores” no son casuales, y hacen pensar que hay mala fe ante la institución tombina.