Por la última fecha de la Superliga, Godoy Cruz derrotó 2 a 0 Tigre con goles de Santiago García y Ángel González y quedó en la segunda posición de la tabla. A puro festejo, realizó su mejor temporada en Primera División.
El Tomba cerraba una temporada increíble. En la segunda posición, clasificado a la fase de grupos de la próxima Copa Libertadores, el único equipo que le supo pelear el torneo a Boca Juniors, el mejor del 2018 (quinto a nivel mundial), en sus filas también tenía al goleador del certamen, Santiago García. Claramente, es un presente que merecía todo tipo de festejos y los hinchas, así lo hicieron. Además de acercarse en gran número al estadio Malvinas Argentinas, homenajearon al plantel con dos minutos de aplausos ininterrumpidos.
El árbitro, Néstor Pitana, dio inicio al encuentro y a los segundos, el Bodeguero ya tendría la primera chance clara de gol. Una rápida recuperación de la pelota, el Morro García sacó un centro que se fue abriendo y Ángel González, en dos oportunidades desperdiciaría la ocasión. Parecía que ya lo tenía controlado, pero a los 25’, correría con uno menos por la expulsión de Victorio Ramis. A pesar de estar con diez jugadores sobre el terreno de juego, no había diferencia alguna. El local seguía siendo el dueño del partido, tenía la posesión del balón y arremetía contra la defensa de Tigre. Esa idea se conservaría por el resto del primer tiempo.
En el complemento, el Matador de Victoria salió con todo. En el amanecer del segundo tiempo, Pérez García quedó mano con Burián, pero el “1” se agigantó y desvió el remate al córner. Minutos más tarde, a los 7’, producto de una buena jugada colectiva, se rompería el marcador. Desde la banda izquierda, Pol Fernández sacó un centro directo hacia la posición del Morro, y este con un frentazo abajo estampó el 1 a 0. En la primera que tuvo, el goleador de la Superliga no perdonó. Letal.
A pesar de estar en superioridad numérica, los dirigidos por el Lobo Ledesma no hacían pie en la cancha. Llegaba hasta tres cuartos de cancha, pero sin peligro alguno. Con el correr de los minutos, el Tomba se fue quedando sin restos físicos y poco a poco, se fue instalando en su propio campo. Sin embargo, a los 34’, liquidaría el encuentro con total justicia. Centro de Angileri, el Morro fue a buscar, pero Chiarini salió a despejar con firmeza, aunque dejó la pelota boyando para que Abecasis la volviera a meter al área chica, y ahí, Ángel González solo tuvo que empujarla.
Como si fuera poco, Diego Dabove se daría el lujo de poner en cancha a los juveniles Valentín Burgoa y Agustín Manzur. Solo para foguearlos, porque el partido a estaba terminado. A pura pirotecnia, Godoy Cruz terminó festejando y bien merecido lo tiene. La mejor campaña de su historia en Primera División. Clasificado directamente a la próxima Copa Libertadores de América. Sin lugar a dudas, el único grande del oeste argentino.