Después de la caída de Godoy Cruz ante Tigre en Victoria, Hernán López Muñoz dialogó en exclusiva con La Página Bodeguera. El diez del Tomba hizo autocritíca en el juego indivial y colectivo, aunque no ocultó su calentura por el arbitraje. “Era algo que podía pasar”, expresó.
Sobre los fallos arbitrales, comentó: “Veníamos preparados, era algo que podía pasar. Queda tragar veneno, seguir con la ilusión. Nadie nos va a sacar la ilusión de estar allá arriba. Sabíamos que veníamos a una cancha difícil con un panorama no muy positivo para nosotros. Seguimos muy confiados, estamos muy contentos con lo que venimos haciendo. Hoy no se jugó bien, no se nos dieron las posibilidades. Nos anularon un gol que no sé porqué lo anularon, pero esto sigue. Hay que ganar las finales que nos quedan”.
“Es feo querer bajar a un equipo que está arriba, bien y que es del interior. Es tragar bronca, seguir jugando de la misma manera. Obviamente, los resultados se nos van a dar. Estamos bien, estamos todos juntos y vamos a seguir por este camino las finales que nos quedan”, agregó.
Respecto a su actuación, López Muñoz confesó: “No me sentí cómodo, me buscaron todo el partido. Me pegaron con y sin pelota, pero así es el fútbol. Los rivales te estudian. No pasa nada, es un partido. Todos tienen un partido malo, espero revetir la situación y jugar como me gusta el partido que viene”.
En cuanto a la charla en el entretiempo del Gato Oldrá, contó: “El El Gato nos dijo que juguemos cómo veníamos haciendo, que cambiemos la cara. Estabamos todos incómodos. Es solo un cambio de actitud. Si hubiesemos jugado el primer tiempo como el segundo, hubiésemos tenido más chances. No queda otra que dar vuelta la página y seguir”.
“Queda pensar en Platense, ganarle en casa que es nuestra fortaleza y seguir pensando en los puestos de arriba”, cerró el diez.