Por la quinta fecha de la Copa Conmebol Bridgestone Libertadores, Godoy Cruz empató 1 a 1 ante Libertad de Paraguay y selló su clasificación hacia la próxima ronda por primera vez en su historia. Histórico.
Érase un 4 de mayo, el Tomba tenía la posibilidad de escribir una nueva página de su rica historia. Esta vez, en un nuevo ámbito, la tan anhelada Copa Libertadores, ese trofeo que todos los clubes quisieran tener en su vitrina.
El encuentro comenzó con el elenco local imponiendo su dominio de entrada, con el objetivo de sacar ventaja rápidamente. A los 2’, producto de un tiro de esquina, Diego Viera estrelló el balón en el travesaño ante la atenta mirada de Rodrigo Muñoz. Sin embargo, el Expreso no se quedaba de brazos cruzados, y a los 10’, Javier Correa, luego de una larga corrida eludió un defensor y remató de zurda pero el portero la despejó, aunque este dejó boyando un rebote peligroso.
La intensidad y la presión alta del equipo no cesaba en ningún momento, Godoy Cruz era más y lo demostraba en la cancha. Era el mejor momento del Bodeguero, pero de forma inesperada, la visita se iba a poner en ventaja en el minuto 23’. Con el despliegue de Marcelo Cañete, y un cabezazo de Danilo Santa Cruz, que iba a doblegar a Rodrigo Rey. 1 a 0, inmerecido quizás.
Tres minutos después, Ángel Lucena remató desde fuera del área, pero la pelota se fue rozando el palo derecho de Rey. El Gumarelo tuvo un envión anímico luego del gol, y buscaba aprovecharlo de contraataque, aunque siempre culminaba las jugadas disparando desde lejos. Cañete, Salcedo y Ramírez probaban, pero Rodrigo Rey se agigantaba cada vez más en el arco. El Tomba la pasaba mal.
Las cosas que tiene el fútbol, que cuando Godoy Cruz merecía el tanto, Libertad anotó de forma sorpresiva. Mientras que, en el 39’ el Expreso iba a conseguir el empate de la mano de Juan Fernando Garro, cuando la visita estaba en su mejor momento. Karma puro y al descanso.
Con los mismos protagonistas en el terreno de juego, se dio inicio a la segunda parte y a los 2’, Iván Ramírez alertaba a Rey con un disparo desde 30 metros. Seis minutos más tarde, Lucas Bernardi decidió mandar a la cancha a Pol Fernández en lugar de Diego Poyet, para prestar más atención a la marca. Además de Poyet, Juan Fernando Garro iba abandonar el campo, mientras que Marcelo Benítez lo reemplazaría. Básicamente, en los primeros 15’ no iba a transcurrir nada relevante.
Con el correr de los minutos, el elenco paraguayo fue inclinando la cancha buscando la victoria que lo mantuviera con vida en el certamen. A los 20’, la visita tuvo una oportunidad increíble de adelantarse en el marcador en los pies de Salcedo. Se esfumaba la esperanza gumarela. Por otro lado, Bernardi agotaría variantes, pero no de la forma que quisiera, ya que Javier Correa debió salir lesionado, dándole su lugar a Fernando Nuñez, el juvenil que realizaría su debut oficial con la camiseta azul y blanca.
La intención del local era clara, aguantar el resultado cueste lo que cueste, y para eso, iba a retrasar sus líneas y esperar al contrataque. Cada minuto que pasaba, era una eternidad, como si el partido se estuviese disputando en cámara lenta. Los corazones se volverían a paralizar en el minuto 35’, cuando Adalberto Román cabeceó en dirección de Rey, que contuvo con suspenso. Los hinchas tombinos debían seguir sufriendo.
Párrafo aparte se lleva el árbitro chileno, Roberto Tobar, quien no tuvo una buena noche y a los 45’ decidió expulsar de forma exagerada a Ángel González. Muy cuestionado el arbitraje del colegiado. Ante la adversidad, el Bodeguero debía aguantar con un jugador menos y en la última jugada de la noche, el indiscutible capitán, Rodrigo Rey sacó un mano a mano tremendo para quedar en la historia.
Si no se sufre, no vale. Godoy Cruz sigue escribiendo su historia y por primera vez, avanzó a octavos de final de la Copa Libertadores. Histórico y anecdótico es lo que ha hecho este humilde plantel, que se plantó y puso la cara ante los grandes del grupo. Sin dudas, que por los colores, que por la historia, GODOY CRUZ SIGUE SIENDO EL MÁS GRANDE DE MENDOZA.