Símbolo de la cantera tombina, y protagonista del punto de inflexión del fútbol mendocino al lograr el ascenso a Primera con Godoy Cruz en 2006, incluso anotando un gol, Mariano Torresi se detuvo en BodegueTV y habló sobre la época gloriosa que vivió desde adentro y también de su actualidad, en la que ocupa parte de su tiempo jugando futsal en el club.
“Hoy nos encontramos en el primer lugar, aunque haya equipos que adeuden partidos. Los partidos son duros, y hay que tener esa paciencia de que, si no se pueden ganar, no perderlos. Necesitamos sumar puntos, y una cosa llevó a la otra”, expresó sobre el presente de la Primera (A) de futsal, que tiene como objetivo alejarse del descenso.
Torresi actualmente es dirigido por su hermano Pablo, y cuenta que fue la motivación principal para sumarse al plantel. “El equipo trabaja, está muy bien preparado físicamente y son unos chicos muy humildes. Me sumé más que nada para darle una mano a mi hermano, pero sé que es un nivel muy alto y eso me encanta”, agregó.
Su llegada a Mendoza
En este paso por el primer programa de BodegueTV, el ahora ex futbolista profesional fue consultado sobre la forma en que llegó a Godoy Cruz nuevamente. “Empecé a venir a Mendoza más seguido. Mi papá estaba muy mal y dejé todo organizado en Entre Ríos, donde tengo mi trabajo y a mis hijos, para venirme acá. Y como quería seguir ligado al fútbol, porque la pandemia me retiró, pero podría haber seguido, decidí jugar futsal porque mi hermano me lo pedía. Y primero empecé en el Senior para agarrarle la mano a esta manera de jugar, distinta a la del fútbol 11”, comentó. Pero aclaró que “sólo por 6 meses, después vuelvo a una categoría menor porque es muy exigente el ritmo”.
Mariano no dejó pasar lo difícil que le resulta tener en Entre Ríos parte de su vida: “Estoy entre la espada y la pared, siempre lo digo. Tengo a mis hijos y un complejo de canchas allá”, cerró, subrayando que “es un sacrificio muy grande”. Además, se refirió a la posibilidad de armar una escuela de fútbol acá, como uno de sus proyectos.
Campeonar con el Tomba y lograr el ascenso, el “Cali” remarcó que “le tocó vivir muchas cosas con el club”, pero que en lo más alto estuvo ese paso histórico. “Era un grupo muy unido. Ni nosotros esperábamos poder hacer esa campaña, fue de la misma manera que por ahí siempre es Godoy Cruz: mantener la categoría, pelear arriba y si se daba… Y bueno fue así, se nos fue dando, nos la creímos y también, siempre digo, tuvimos mucha suerte. Porque siempre jugaba el mismo plantel, no había lesionados, y si se lesionaba uno, el que entraba lo hacía en las mismas condiciones o mejor incluso. La unión hace la fuerza y ese grupo consiguió lo que tanto esperábamos”.
El recuerdo ante Chicago
En la final ante Nueva Chicago, el ex mediocampista marcó el gol de penal en la ida, de visitante, y detalló cómo vivió los segundos previos. “Ese día el estadio estaba lleno, y todos me silbaban. Yo siempre sabía a dónde iba a patear, cuando acomodaba la pelota y me hacía para atrás ya elegía el lugar, después si el arquero se tiraba a ese palo o no, eso es buscar la forma de que no llegue. Y me pasó que ese día fue el único que no sabía a dónde patearlo, entonces cuando voy corriendo hacia la pelota elijo y me acuerdo de que me asusté porque la pelota pica y pega en el palo. Gracias a Dios entró”, recordó.
“Ese fue el gol más importante de mi carrera. Y el más lindo, para mí, fue el gol de tiro libre en la cancha de Newell’s. Por la distancia, por donde entró, y porque nadie creía que le iba a pegar. Yo por ahí le pegaba de cualquier lado, de caradura”, respondió entre risas ante la pregunta de con qué dos goles se quedaban de su carrera como futbolista.
Sobre el presente del plantel de Primera División, dirigido por Diego Flores, sostuvo que “es un orgullo” verlo en la semifinal de Copa Argentina. “Me gusta, no ha cambiado mucho a lo que era Méndez. Obviamente que el técnico siempre mete su mano y se ha notado la de Flores, y en muchos jóvenes. Eso es muy bueno porque es la cantera que tiene el club, la que ha trabajado. Seguramente, siempre hay cosas para corregir, los partidos son todos diferentes. Lo importante es que el equipo se sienta con confianza, y que el técnico le genere eso, que es lo que está pasando. Creo que estar en la semifinal de la Copa es algo que a Godoy Cruz le hace muy bien, no sólo a la gente sino también al plantel, porque eso te genera confianza para el campeonato de liga”, finalizó.