En los dos últimos encuentros a Godoy Cruz le costó encontrar el juego que venía mostrando en las primeras fechas, pero a pesar de esto el Tomba no perdió, sino que empató en Junín y ganó esta noche frente a Olimpo y en ambos encuentros sin tener el gran nivel de las primeras fechas tampoco sufrió mucho y esto se debe a la gran solidez defensiva.
Partido a partido el nivel defensivo crece, desde la gran dupla paraguaya (Viera – Ortíz) que ganan todo de arriba, de abajo, se complementan muy bien entre sí y tienen una personalidad, típica de defensor paraguayo, que marcan territorio en cualquier cancha.
Abecasis desde su llegada a Godoy Cruz ha mostrado un altísimo nivel basado en una muy buena marca, un ida y vuelta constante, una gran técnica que no acostumbra tener un lateral y siendo muy punzante de mitad de cancha para adelante. Del otro lado, Lucas Ceballos partido a partido va sintiéndose más cómodo jugando con la pierna cambiada, cumpliendo siempre con la marca y con la entrega que nos tiene acostumbrado el jugador sanjuanino.
Igual estos jugadores no son máquinas ni perfectos y aunque sus actuación por momentos roza la perfección si hay algún error o alguna virtud en el ataque rival aparece Rodrigo Rey, un arquero como a esos que se los denomina “arquero de equipo grande”, porque cuando lo exigen aparece con atajadas claves como la de hoy ante el cabezazo de Moiraghi.
Sin dudas que lo que se disfruta de Godoy Cruz es el gran juego que tiene el equipo de Méndez, pero la solidez defensiva es sin duda una de las claves más importantes que tiene el, hasta ahora, único puntero de la zona 1.