El Expreso recalaba en Junín para revertir la situación futbolística que generó la derrota pasada frente a Rosario Central.
Mirando un poco lo que se le viene a Godoy Cruz, se entiende que estos son los partidos donde sumar es obligatorio con este formato de torneo.
Con varios reemplazos respecto al once titular que jugó en Mendoza, Pedernera puso en cancha a: Petroli; Morán, Mendoza, Rossi, Arce; Leyes, Fernández, Pérez, González; Cejas y Parzajuk.
El Sarmiento de Sanguinetti, volvía a casa después de la derrota frente a Independiente por 2-1.
PRIMER TIEMPO
El primer tramo de las acciones fue un espanto visual, tanto para propios como para ajenos.
El elenco de Ernesto Pedernera intentó ordenarse desde el fondo hacia adelante, sin embargo, Sarmiento (qué tampoco cuenta con demasiadas armas) fue mejor en esta etapa, en parte gracias a Magnin y Carabajal, quienes marcaron presencia por sus respectivos sectores.
A pesar del cambio de central respecto al partido pasado, así como Leandro Quiroz no convenció en su debut, el comienzo de Tomás Rossi dejó también algunas dudas.
Respecto a los laterales, Juan Morán demostró que le cuesta mucho en posición de ataque, anulando una buena posibilidad de ataque por la banda izquierda, donde Alex Vigo no fue lo suficientemente presionado para cometer errores.
Por el otro lado, Lucas Arce sentenció su presente con reiteradas acciones equivocas. No es el único futbolista al que se lo nota falto de ritmo y errático.
El regreso del Indio Fernández al once titular fue de a poco, mostrandose impreciso, aunque de menor a mayor. Le cuesta cuando el equipo no tiene la pelota.
Juan José Pérez fue de lo más destacado de la visita, siendo siempre peligroso al recibir la pelota, aunque no debemos ignorar lo mucho que le cuesta soltarla en el último tercio.
En materia de ataque, el análisis es prácticamente imposible, ya que ni Parzajuk, ni Cejas tuvieron balones claros de cara al arco de Acosta. De todas maneras, Juan Cejas no estuvo fino en jugadas simples qué pedían pase.
Se fue el primer tiempo y Godoy Cruz no tuvo nunca una idea clara. Franco Petroli salvó el arco en muchas oportunidades y disfrazó lo que (al menos para mí) fue un papelón del equipo mendocino.
SEGUNDO TIEMPO
En 15′ de juego y sin que el equipo pueda generar siquiera una oportunidad de gol, o minimamente una asociación interesante, llegaron los primeros cambios. Barrea por Cejas y el debut de Yañez quien ingresó en lugar de Pérez.
El chileno entró motivado, con movilidad y simpleza adelantó al equipo y le dio mayor claridad. Daniel Barrea se posicionó de nueve, y aguantó algunas pelotas además de intentar algunos remates al arco.
Más adelante, Altamira, Ábrego y Pozzo reemplazaron a Parzajuk, González y Fernández, respectivamente.
Los minutos pasaron y el partido se terminó con un empate sin sabor.
CONCLUSIÓN
Queda claro que con manotazos de ahogado no se puede salvar un año tan importante. Para eso hace falta organización y una estructura. Hoy esa estructura que en algún momento pareció dar resultados, se esfumó.
Godoy Cruz mantiene un presente futbolístico pésimo, además un futuro preocupante. El equipo de Pedernera no tiene actitud, físicamente está muy lejos de lo que significa representar al azul y blanco y como si fuera poco, las ideas dentro y fuera de la cancha no abundan.
Luego de ver el trámite del partido, el Tomba suma su primer punto y le dará valor, con mucho trabajo y autocrítica de por medio, se deberá trabajar en la semana y llegar preparado para enfrentar a Talleres el próximo martes.