Luego de la inesperada derrota con Atlético Tucumán, Jaime Ayoví se fue muy caliente al no poder volver a sumar de a 3 y prenderse en el lote de los de arriba.
“Nos llegaron cuatro veces y nos metieron dos goles. Así es el fútbol. Hay que levantar cabeza. Hay mucho que corregir, creo que no jugamos un mal partido pero no metimos las que tuvimos”, comenzó diciendo el ecuatoriano haciendo un análisis del partido. Y añadió: “No tuvimos profundidad como en otros partidos”.
Luego, explicó: “Ellos se metieron atrás y jugaron de contragolpe, al no tener un 5 de marca y tener dos mixtos (Fernández y Giménez), si no tenemos la pelota sufrimos. Nos vamos con una sensación amarga porque si metíamos una de todas las ocasiones de gol que tuvimos el partido hubiera sido diferente”.
En cuanto a la situación de Sebastián Méndez, quien se fue del estadio sin hacer ninguna declaración, el delantero aclaró: “Hasta el momento no lo he visto. Creo que se metió en su camerino, tiene sus razones para estar caliente”.
“Duele muchísimo porque si ganábamos y Estudiantes perdía nos poníamos a 6 puntos. Era importante terminar el año de la mejor manera. Con esta derrota quedamos relegados, esperemos ganar de visitante y hacer lo mismo de local”, cerró Ayoví, quien se mostró apenado por una derrota que ni el plantel ni la gente esperaba.